¿Me da un protector solar?
Cuantas veces escuchamos este pedido en las farmacias? Pero, será que quienes escuchan esto sabrán qué hacer?
Pues sí que saben lo que deben hacer! Vender, vender, vender!!!! Lo que no significa atender al paciente o al cliente que va por una ayuda a su problema de cuidar su piel del sol.
Entonces, quien debería ser el responsable de la salud de la piel de las personas? El Dermatólogo, nadie más.
El protector solar, o filtro solar o pantalla solar, en general representan lo mismo, salvo ciertas diferencias técnicas, pero se utilizan para proteger la piel de la radiación solar.
Hasta los 18 años lo jóvenes ya han recibido el 80% de la radiación solar de toda su vida.
Las lesiones provocadas por la exposición solar continua comienzan a presentarse desde los 30 años.
Desde el primer año de vida es que la piel humana comienza a recibir radiación solar. Significa que una persona de 35 años ya ha recibido radiación solar durante 34 años, quiéralo o no. Al salir a la calle, al campo, al mercado, al colegio, etc.
Actualmente se recomienda aplicar protector solar a los bebes desde el 6to mes de vida, al salir a la calle.
La gente piensa que caminar por la sombra o usar gorrita los protege del sol. Nada más equivocado. Imaginen que estamos en un microondas gigante donde recibimos radiación por todos lados, las 24 horas del día.
De noche no hay luz solar pero si radiación. El usar ropas gruesas o de manga larga protege muy poco o casi nada de la radiación solar, tal vez del calor, de la sensación térmica de calor, pero no de la radiación solar, a no ser que se usen ropas con tejidos especiales con filtro UV.
Lo mismo sucede con los lentes de sol. No basta que sean oscuros, sino que deben tener un filtro UV para proteger la vista, el ojo, de la radiación solar que provoca conjuntivitis, queratitis actínica, etc.