Cuidando las uñas – Parte 1
La visita a la manicurista o al podólogo, con frecuencia cada vez más creciente, resulta muy cara ya que uno termina con las uñas peor de lo que estaban., El trabajo empírico no profesional, improvisado pasan la factura y provocan daño en las diversas estructuras del aparato ungueal (uña, cutícula, bordes de piel). Problemas crónicos de las uñas (Paroniquia), presencia de hongos (Onicomicosis), daño de las uñas por virus (Verrugas) tienen su origen en el maltrato que reciben las uñas durante un mantenimiento inadecuado, y muchas veces irresponsable. Mucho tiene que ver el uso de instrumentos contaminados fabricados de materiales imposible de esterilizar luego de su uso. Lo ideal es usar instrumentos propios del cliente.